El aporte de calcio de algunos helados llega al 30% de la cantidad diaria recomendada.
A pesar de que son alimentos calóricos, se pueden ofrecer a los niños y a los ancianos ocasionalmente como postre o merienda porque, pueden completar la dieta de forma muy agradable para ellos, aportándoles nutrientes como la leche en el caso de los de base láctea, o zumos de frutas si se trata de polos o sorbetes.
Fuente: http://www.webconsultas.com/dieta-y-nutricion/dieta-equilibrada/los-helados-un-postre-ideal-para-ninos-y-ancianos-13990 20 de octubre de 2014
Los helados de base láctea se componen generalmente de leche desnatada, azúcares y grasas, mientras que los polos y los sorbetes contienen sobre todo agua, zumos de frutas y azúcares. La textura de estos alimentos hace que resulten fáciles de masticar, y su sabor dulce les convierte en una buena alternativa para la merienda de niños y mayores cuando tienen menos apetito.
El aporte de calcio de algunos helados llega al 30% de la cantidad diaria recomendada, lo que supone una gran ventaja para los ancianos, que tienen tendencia a sufrir descalcificación y necesitan ingerir diariamente un mínimo de 800 miligramos de este mineral para mantener los huesos sanos, mientras que en el caso de los niños, el calcio es fundamental para el desarrollo del sistema óseo.
Elegir helados artesanales cuando sea posible, o aquellos envasados en cuya elaboración se hayan tenido en cuenta los valores nutricionales (con un buen aporte de zumo de fruta o calcio), y se haya limitado la cantidad de azúcar y grasas saturadas para reducir el número de calorías. En postres y meriendas, además, se puede combinar el helado preferido del consumidor con frutas como plátanos, melocotones o fresas.