Desde la aprobación del Botox en España su uso ha crecido de manera importante y especialmente en estos dos últimos años. Después de la pandemia del COVID-19 los pacientes que han comenzado a infiltrarse Botox ha crecido en número de manera importante, incluso hasta un 50% más de nuevos pacientes con respecto a años anteriores. Algo importante también es reconocer que cada vez más personas saben que el Botox no es un relleno facial, es simplemente el tratamiento más efectivo para relajar las arrugas faciales y hacer que desaparezcan.
Botox: Tratamiento de las arrugas de expresión.
La cara es la zona más expuesta a las agresiones externas (rayos solares, cambios de temperatura, etc.) y por ello es la que más muestra el envejecimiento que sufrimos con la aparición de las arrugas, al inicio más finas y con los años se vuelven más profundas. Los usuarios confían cada vez más en la aplicación de Botox por sus resultados evidentes y por sus beneficios.
Las arrugas de expresión son consecuencia de los movimientos expresivos faciales que se marcan con el paso de los años y por suerte tienen solución. Desde la consulta del Dr. Blanco recomendamos siempre acudir a consultas de doctores que estén bien formados en el uso del Botox, la anatomía humana es bastante compleja, por eso recomendamos acudir a doctores que estén acreditados por la AMEIB (Asociación de Médicos Estéticos de las Islas Baleares), este listado lo puedes encontrar en la página Web del Colegio Oficial de Médicos de las islas Baleares , siempre podremos evitar una caída de párpados, una ceja demasiado elevada o cualquier otra mala técnica del Botox.
Localizaciones más frecuentes son:
- Frente
- Entrecejo
- Zona externa de los ojos: patas de gallo
- Dorso de la nariz
- Alrededor de la boca: peribucales o código de barras
- Surcos nasogenianos
- Comisuras bucales
Desde la SEME (Sociedad Española de Medicina Estética) recomiendan el Botox como el tratamiento más eficaz para dar solución al inicio del envejecimiento de la piel del rostro. El tratamiento idóneo para las arrugas de expresión del entrecejo, de la frente y de las patas de gallo es la toxina botulínica, ya que actuamos relajando los músculos que al contraerse intervienen en su formación.
La toxina botulínica actúa relajando los músculos que provocan dichas arrugas, por lo que éstas desaparecen confiriendo al rostro un aspecto relajado y sin arrugas. En definitiva más joven. Actúa de forma selectiva sobre la zona predominante del músculo, relajando la expresión del rostro ya que evita la formación de la arruga sin perder la expresividad personal.
Este efecto se manifiesta a los tres días aproximadamente de ser inyectada. Su duración es de 4-6 meses, siendo lo recomendado realizar 2-3 tratamientos anuales para mantener un aspecto siempre joven.
Los efectos secundarios que pueden aparecer, siempre de tipo local, son:
- Dolor en el punto de inyección.
- Edema local y eritema.
- Pequeño hematoma en la zona de inyección.
- En algunos casos puede aparecer leve cefalea transitoria que remite con un analgésico.
En muy raras ocasiones se han observado efectos adversos debidos a la diseminación del efecto de la toxina en lugares alejados del lugar de administración, pudiendo los pacientes tratados con dosis terapéuticas experimentar debilidad muscular exagerada.